La importancia
de la distribución en planta y los tipos de sistemas de producción en la
empresa
El proceso de transformación de materiales se lleva adelante en una planta
de producción, por lo tanto, su distribución debería obedecer a criterios que
faciliten tal finalidad. De esta manera, es posible afirmar que el tipo de
diseño o la distribución en planta (también conocida como layout) debe responder
al volumen de producción y la variedad de productos que se desea producir
El sistema de producción intermitente
Este tipo de producción considera la fabricación de volúmenes bajos de
productos según pedido, por ejemplo, una cantidad reducida de productos de
modelos distintos. En la producción intermitente los trabajadores deben estar
capacitados para elaborar distintos tipos de productos, siendo que usualmente el
equipamiento utilizado tiene propósito general. En tal sentido, cada trabajo
sigue una trayectoria propia o ruta en la planta de producción.
En tal contexto, la distribución de planta más representativa es la que se
adecúa a una distribución por proceso, en la que se tienen grupos de máquinas de
características similares. Si bien conforme se incrementa la variedad de
productos las rutas pueden ser más complejas, dificultando su gestión, gran
parte de los sistemas de producción consideran este tipo de diseño.
En este tipo de sistemas se fabrica un número elevado de determinados
productos de manera estandarizada. El ejemplo más conocido y difundido es el caso
de fabricación automóviles, en el que una línea de ensamble mantiene un mismo flujo
de materiales, pudiendo producir una gran cantidad de productos de características
similares. En este tipo de procesos los trabajadores emplean equipo
especializado, no se requieren aptitudes especiales y por lo general se
desarrolla una cantidad de tareas inferior a la de los sistemas de producción
intermitente.
Es característica de este tipo de sistemas que el flujo de producción para cada
producto sigue la misma secuencia de operaciones, lo que determina la
distribución en planta. De esta manera, una planta de producción continua,
requiere una distribución por producto, en el que el equipo se ubica de tal
forma que el producto a ser fabricado siga siempre la misma ruta.
En tal sentido, la gestión de una planta de producción continua difiere de
aquellas con producción intermitente, pues en lugar de la programación diaria
como tarea crítica, se enfrenta el problema de establecer y balancear tareas de
cada línea de ensamble, de tal manera que se garantice la continuidad del proceso.
El sistema de producción por lotes
Es un híbrido entre los dos tipos de sistemas señalados previamente. En este tipo de sistemas la planta de producción no produce volúmenes elevados y los lotes a producir varían de tamaño, desde unas cuantas unidades a millones. Si bien es posible efectuar atender en cierta medida la producción a pedido, no se tiene la misma flexibilidad de los sistemas de producción intermitentes.